El Bayern Múnich sigue sin convencer y encima sin ganar, luego del empate 1-1 ante su público frente al Werder Bremen, este sábado en la segunda jornada de la Bundesliga alemana de fútbol.
Los bávaros, privados de su capitán Mark van Bommel, del central argentino y del punta italiano Martín DemichelisLuca Toni, lesionados, arrancaron bien el partido en el Allianz Arena ante los ojos de Franck Ribéry, quien estuvo en el banquillo y luego entró, pero no pudo cambiar la historia.
El bombardero Mario Gómez, adquirido por 30 millones de euros, falló de cabeza a los 5 minutos una situación clara, en un inicio con el Bayern de Louis van Gaal dominando.
El Bremen respondió con otro cabezazo de Petri Pasanen, despejado por el portero Michael Rensing (29). Fue un aviso, ya que el equipo liderado por Torsten Frings abrió el marcador a través de Mesut Özil (39).
En el segundo tiempo, la entrada en juego de Ivica Olic en lugar de Miroslav Klose no dio nuevas ideas al elenco con más títulos de Bundesliga (21).
El público metió presión para ver a Ribéry, con la esperanza de que el astro francés cambie algo, pero hizo poco: apenas una asistnecia para Olic, pero el portero Tim Wiese tapó el gol.
A los 72 minutos, cuando el Arena se convertía en una caldera, Gómez se vistió de bombero y apagó el incendio. Durante el último cuarto de hora, el Bayern fue a buscar sus primeros tres puntos, pero no logró quebrar al Werder, que lo amargó con otro empate, el segundo seguido del Bayern en Bundesliga bajo el mando de Van Gaal.
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